Son de Austin, Texas y realmente saben muy bien que es esto del indie-rock. Cuando oigo hablar de música indie me viene siempre a la cabeza Spoon, no porque les adore tantísimo que crea que es el mejor grupo de indie-rock que exista. Pero sí porque se formaron hace casi dos décadas cuando aún este estilo musical estaba muy verde, y poca gente conocía de qué tipo de música estábamos hablando. Así surgía Spoon, un grupo que le ha sido fiel a esta tendencia.
Como buen grupo de la América rústica de indie no podía faltar un ingrediente excencial: el folk. Esto unido a melodías seductoras y tarareables conseguimos la combinación perfecta para una banda espectacular, de la que nos podamos dejar conquistar y estar orgullosos de escuchar y seguir.
Cuentan con seis LP’s y puedo asegurar que han mantenido desde el principio la naturaleza de todos sus discos indemne. Simplemente este mérito se merece un elogio. Te guste o no te guste lo que hagan. Pero si sabes de música y te comprometes, como si de una tesis se tratara, a escuchar cuidadosamente su carrera, entenderías de lo que estoy hablando. No han renunciado a su estilo con el que comenzaron amoldándose a las épocas y exigencias comerciales como tantos otros grupos harían. Esto es difícil, ya que el mercado no premia la creatividad y el libre albedrío. Pero a Spoon no les ha importado. Quizá por esto, no estemos hablando de un grupo que haya cosechado éxitos innumerables. Dejémoslo en éxitos modestos. Su frescura y lo pulcro de sus canciones siguen presentes hasta su penúltimo trabajo, “Ga Ga Ga Ga Ga”, el más exitoso hasta el momento.
Son cuatro, sus componentes. Britt Daniel, voz y a la guitarra, Jim Eno a la batería, Rob Pope con el bajo y Eric Harvey al teclado y guitarra entre otras cosas. También hago mención a sus antiguos miembros: Joshua Zarbo, Andy McGuire y Grec Wilson.
“Telephono”, su primer álbum, sale al mercado, en 1996 como un pequeño trabajo, desinteresado y original. Preciso para garantizarse un futuro halagador y firmar su segundo disco “A series of Sneaks” (1998) con una multinacional.
Luego le siguen “Girls can tell” (2001) y “Kill the moonlight” (2002) en el que hago un parón y recalco un tema: “The way we get by”. Me encanta.
Yo destaco como disco favorito el que viene a continuación “Gimme Fiction” (2005) un trabajo delicado y muy tierno, con canciones como “I summon you”, “I turn my camera on” y “The two sides of monsieur Valentine”. Me quedo sin palabras. Este es el momento de llamarme cursi.
“Ga Ga Ga Ga Ga” (2007) no se queda atrás. “The underdog” te cautiva y “Rhthm & Soul” te transmite toda la magia de la música hecha desde dentro.
Ahora están de promoción, con su nuevo single “Got Nuffin’ ”. Aún no me ha dado tiempo a exponer mis impresiones . Pero, en su línea.
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1 comentario:
He llegado de casualidad a tu post, y tu blog, y ya es raro que alguien escriba sobre Spoon. Coincido con lo que comentas, aunque la verdad que nunca los había relacionado con la etiqueta "indie". Para mí Spoon son Spoon y me resulta difícil describir el sonido a mis amigos cuando me preguntan por mi grupo favorito, porque yo ahí no tengo dudas: es, en mi opinión, el mejor grupo en activo que hay ahora en todo el mundo ;) Por creatividad, por firmar discos redondos que no se queman de escucharlos, por renovación constante, por las melodías y el ritmo. Y por un directo acojonante, claro! Y justamente ahora estaba escuchando el Got Nuffin, que me acaba de llegar, y pinta muy, pero que muy bien. Producción más sucia, no tan limpia como en algunos cortes de Ga Ga Ga Ga Ga ni Gimme Fiction, más urgencia, tal y como comentaban hace unos meses en una entrevista. Esperaremos a ver lo que se cuentan en el nuevo disco...
Un saludo!
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